A la opinión publica en general:
Ciudad de México, a 23 de julio de 2020.
Correspondiente a la defensa legal que tanto nosotros, como SOCIOCRACIA A.C. llevamos a cabo de las víctimas de la tragedia acontecida en el Hospital General de Morelos “Jose G. Parres”, en la que se observan diversas violaciones a los derechos humanos que desencadenaron el fallecimiento de 15 recién nacidos y que de acuerdo a la recomendación emitida por la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos en el expediente CDHM/SE/V3/061/151/2018, procede reconocer la violación de los derechos humanos y emitir una disculpa pública a las víctimas y que las autoridades mencionadas aceptaron solo de manera parcial. Tal y como se hace notar en el oficio SSM/DG/SJ/2672/2020 del 10 de julio 2020 firmado por el Dr. Victor Manuel Martinez Jardón, Director del Hospital General de Morelos Jose G. Parres, en el que hace caso omiso de los resultados de las investigaciones, evidencias y de los fundamentos legales aplicables, negándose, a reconocer la violación de los derechos humanos y emitir una disculpa pública; de conformidad con los artículos 61, 62, 63, 65 y 66 de la Ley de la Comisión de Derechos Humanos, hacemos del conocimiento de la opinión pública que presentaremos nuestra impugnación en tiempo y forma con la finalidad de que dicha comisión determine lo que a derecho corresponda.
Tenemos la firme convicción de que el acceso a la justicia de todos los habitantes debe ser garantizado en un Estado de Derecho, no obstante que las autoridades actuales no estaban en funciones cuando ocurrió el hecho trágico, la responsabilidad institucional persiste sin menoscabo del tiempo transcurrido, los padres de los recién nacidos por lo menos merecen el reconocimiento institucional de los actos, dolosos o culposos, que provocaron la perdida de la vida de 15 recién nacidos. Esto con independencia del resultado de las investigaciones que lleve a cabo la Fiscalía General de Justicia del Estado de Morelos, que deriven en la definición de cualquier responsabilidad de tipo pena porque el tema en cuestión, es la violación de los derechos humanos, cuya observación es facultad de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos en este caso y cuya recomendación soporta nuestra motivación.
Como se puede constatar en la recomendación mencionada existen al menos 23 evidencias que constan de los expedientes clínicos, los cuales fueron analizados por especialistas; dictámenes especializados; notas epidemiológicas informativas emitidas por la Unidad de Vigilancia Epidemiológica Hospitalaria; boletines emitidos por la entonces Secretaría de Salud de Morelos e incluso, elementos aportados por la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Morelos COPRISEM, que incluso radicó el expediente SSM/COPRISEM/JJC/113/2018 derivado de diversas violaciones a la normatividad sanitaria vigente por parte del Hospital General de Morelos Jose G. Parres.
Tal y como he externado públicamente en numerosas ocasiones, no se trata de un asunto de bajo impacto, en el que no hubo consecuencias; por el contrario, en el caso que tenemos el honor y la responsabilidad de defender, se perdió la vida de 15 recién nacidos, lo que generó un trauma físico y psicológico irreparable para sus padres y demás familiares, lo anterior se hubiera podido evitar, cumpliendo con los protocolos de control epidemiológico, capacitando al personal médico y de enfermería, y con infraestructura, instrumental, equipo e insumos médicos adecuados; todo responsabilidad absoluta de la Secretaria de Salud de Morelos y del Hospital General de Morelos. En ningún momento, fue responsabilidad de los padres, que incluso se vieron en la necesidad de adquirir, a su propia costa, debido a su inexistencia en el hospital, medicamentos para intentar salvar la vida de sus hijos.
Es imposible reparar el daño cuando se pierde una vida; no existe un monto económico que le recupere su hijo o hija recién nacida a sus padres y seres queridos, no existe el olvido ni el alivio para un dolor tan grande. Desearíamos que las autoridades del estado de Morelos y en especial que las autoridades médicas, mostraran al menos un poco de empatía y sensibilidad, tan indispensables para el ejercicio de tan noble profesión como lo es la médica y como lo es tambien, para quienes por parte del Estado se encargan de proveer servicios de acceso a la salud, lo cual es un derecho humano y una garantía individual contenida en el artículo 4 de nuestra carta magna.
Es indignante y preocupante, que tanto la administración pasada como la actual, dejen en evidencia su insensibilidad e irresponsabilidad en una tragedia tan grande. Con sus actos revictimizan a los padres, los obligan a lidiar con el dolor y la frustración de perder a un ser querido y a cesar en sus intentos por obtener justicia. Se les niega su derecho a recibir una disculpa pública, a ser escuchados y externar su dolor; se les niega la esperanza de que su perdida no haya sido en vano y de que existe al menos, la intención y el compromiso por parte de las autoridades estatales y del mismo hospital, de que ningún padre más atraviese el mismo calvario.
Sin lo anterior, no puede existir justicia para los padres y ésta, es un derecho humano inalienable. La postura evidenciada en el oficio SSM/DG/SJ/2672/2020 de fecha 10 de julio 2020, del Director del Hospital General de Morelos Jose G. Parres, es falsa, ofensiva e incongruente, porque acepta las omisiones de la institución, pero no acepta la responsabilidad de los efectos; esto es, confiesa y aporta evidencias que demuestran la culpabilidad de la institución a su cargo, pero en el mismo documento, niega y evade la responsabilidad de la misma.
Lamentablemente, lo acontecido en los meses de mayo a julio de 2018, no es un caso aislado. Como es del conocimiento de la opinión publica y como lo hemos publicado tanto Sociocracia A.C., como Lex Pro Humanitas, en el año 2010 en el mismo hospital, se suscitó un evento que provocó la muerte de 17 de los 18 recién nacidos contagiados por una bacteria semejante, cuyas víctimas indirectas, aún no han accedido a la justicia después de 10 años. Tenemos tambien el honor de representar a la familia del único sobreviviente, que aun padece física y psicológicamente las consecuencias de dicha tragedia.
Por todo lo descrito anteriormente, hacemos del conocimiento de la opinión pública que Sociocracia A.C. y el despacho jurídico Lex Pro Humanitas, en representación de las victimas que nos han favorecido con su confianza y que nos han expresado su firme e inamovible intención de obtener, por todos los recursos legales disponibles, la justicia a la que tienen derecho, que presentaremos nuestra impugnación, ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, aportando los elementos necesarios, para que las autoridades de Morelos acepten de manera total, la recomendación emitida por la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Morelos, incluyendo, como tema principal no negociable, la disculpa pública y la garantía de no repetición por parte de las autoridades del Estado de Morelos.
Esperamos que dichas autoridades aprovechen la oportunidad de reivindicar su postura, recordando que la naturaleza del servicio público es velar por el interés superior de sus gobernados, respetando en todo momento sus derechos humanos. Tenemos la certeza con base en nuestra experiencia y trayectoria, que cuando la sociedad y el Estado se unen por el bien común, no existe reto imposible de superar.
Muy atentamente.
Mtro. Fernando Manilla Contreras
Director General Lex Pro Humanitas
Leave a Reply